Sí, lo que nos hace sentir libres es lo que nos acaba uniendo... también lo que nos hace sentir desgraciados nos acaba uniendo. Las situaciones extremas siempre unen, quizá, por eso de que al ser extremas, la mente y el corazón se dejan de tonterias y de lo superfluo y van al grano.
Un besote, uno bien gordito y muy sonoro
Anónimo ha dicho que…
Cuantas veces quisiera entregar mi libertad por las cosas que me unirían.
Comentarios
¿Es, de verdad, serlo?
Será, si lo decides,
Pero no lo entiendo.
Es la continuación del Momento 40.
Podemos cambiar el "sentir" por el "ser".
Abrazo
Y todo ello se va engarzando como finas cuentas de un collar,
con delicados hilos de oro,
o rojo como la sangre,
y de broche...
Un corazón!
P.D. Es cuestión de sentir,
no entender...
sin generar conflicto :)
un beso alhe¡¡
Un besote, uno bien gordito y muy sonoro
Que cosas!!! que cosas!!!
Un abrazo.